Dónde pasaste toda esta larga realidad?
Ya te extrañaba. Siempre tan silenciosa, tan cálida y complaciente, tan amigable
Pero ahora que estás aquí, que has saturado cada segundo de mis largas noches
Ahora que has llenado cada rincón de mi fría y oscura cueva donde se oye el eco de tus pasos
Ahora solo me quedas tú de compañía
Ahora no me queda más que tu presencia
Tengo que conformarme con el eco de tus pasos, tu voz apagada y tus calladas risas
Y el sonido hueco de mi copa siempre vacía
Aunque siempre habrá una buena bebida fría
Algunos bocadillos y buena música de fondo
Y la televisión siempre prendida. Soledad...
Y escribir, recordando cada segundo a tu lado
Escribir versos frenéticos, vacíos, vanos
Mi pluma no se detiene, mi corazón late contigo, mi alma solo siente tu presencia
Y mis ojos solo ven tus negros ojos de ensueño delante mío, por donde vaya
Dormido o despierto, en cada segundo de mi miserable vida, o cuando ya haya muerto
Seguiré siempre atrapado en ti, amada mía
Esperando que ocupes el lugar de la soledad
Cómo única compañía...
No hay comentarios.:
Publicar un comentario