Tranquilo. Tranquilo. Acércate lentamente y toma mi mano. Trato tranquilizarme, aunque el miedo aún me agobia. Respiro agitado
Poco a poco te acercas a mi, mientras yo trato desesperadamente de hacer lo mismo
Pero mis esfuerzos son inútiles, siento que con cada movimiento me voy hundiendo más y más
En eso siento que las aguas me cubren por completo. Hago un movimiento violento con mis brazos, no sabía que esto era el manotazo de ahogado, pero en ese último segundo siento que me coges firmemente de una de ellas y tiras vlcon violencia se mi. Logras sacarme a la superficie y me tomas de la cabeza, de la barbilla. Tranquilo. Me ordenas. Hago caso
Cada bocanada de aire es una bendición del cielo. De manera ágil y con mucha destreza me trasladar en forma lenta pero segura hasta la orilla. Qué torpeza la mía. No sé nadar y aún así me aventuré a las traicioneras aguas de la playa. Peor aún, es de noche, y la luna alumbra silenciosa la desierta playa
Al inicio creímos que era una aventura romántica, hasta que te retiraste la ropa pues traías el bañador debajo de ella. Yo hice lo mismo, y te seguí cuando te dejaste llevar por las aguas. Y pasó lo que tenía que pasar
Tonto! Me reprochas. Por qué hiciste eso? Por qué noe dijiste que no sabes nadar?
Guardo silencio. Aún me cuesta respirar
Mi orgullo herido, pero solo puedo pensar en lo hermosa que estás con el bañador ceñido, el cabello mojado, la luz de la luna que ilumina tus negros ojos que me miran furiosos, con desaprobación pero con ternura
Me tomas de la manos. Luego me abrazas
No lo vuelvas a hacer. Me pides mientras tus labios se acercan a los míos y nos perdemos en un beso que nos lleva al infinito
Podías haber muerto. Me dices con voz lastimero. Te abrazo. Te miro de nuevo, no quiero perder esta imagen. Quiero tenerla para siempre en mi memoria. Acaricio tus espléndidos cabellos. Aprenderé a nadar, y todo lo que sea necesario para estar contigo. Te digo esto mientras me abrazo a ti y beso esos labios que me traen loco por completo
La luna sonríe a lo lejos. Las estrellas danzan felices. Las aguas están tranquilas, un suave murmullo del caudaloso rio acompaña la magistral música que nos envuelve en un manto de mágico amor en una noche de verano de locura ...
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