Alguna vez empezó el día, no lo recuerdo ya
Era un amanecer glorioso, lleno de promesas
De alegrías por tantas sonrisas y tanta luz
Y esos minutos y horas venideros que decían
Que las cosas irían muy bien, aunque con las horas
Las luces se fueran apagando y las tinieblas
Se apoderaran de la ciudad, bienvenida la noche
El día se terminó y con ella mis sueños
Se acabaron también...
Voy a la cama sin ganas, no quiero que acabe
Pues aún no pude realizar ninguno de mis deseos
Y no quiero que también hoy deba dormir
Engañando a mi corazón y a mi alma, de nuevo
Repitiendo una y otra vez que quizá mañana
Te pueda de nuevo encontrar, una vez mas...
Te encuentro en mis sueños, siempre te encuentro
Y ya no quiero despertar, quiero quedarme
Atrapado en los brazos de Morfeo, que no
Me suelte jamás, en mis sueños están tus ojos
Tus abrazos, tus caricias, tu fenomenal cuerpo
Y por supuesto están tus labios y esos besos
Que no me dejan respirar. No quiero despertar...
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