Renunciar. Hay cosas que nunca tendré
A las cuales voy renunciando poco a poco
Pues los años pasan, las fuerzas se van
Quedan algunos sueños más, pero la mayoría
Quedaron atrás, muchos logrados, es cierto
Unos tan banales que no vale pensar en ellos
Viajar? Algo tan simple y trivial como conocer
Lugares exóticos, turísticos, a dónde van todos
Y creen descubrir mundos nuevos, cuando
Olvidan que no es el destino sino el camino
Y la compañía que hacen que disfrutes
De un viaje de verdad. Soy egoísta, lo lamento
Mi vida ha tenido tantas cosas extrañas y raras
Que nunca volveré a recorrer, y a eso he tenido
Que renunciar. Me gustaría volver contigo
A esos bellos y mágicos lugares, pero a tu lado
Renunciar. Dejar atrás a aquellos que tuviste
Que entregar a la tierra, y saber que nunca
Los volverás a ver entrar por esa puerta
Por dónde tantas veces pasaron. Dejar ir
Es difícil, lo sabes, pero lo aceptas, porque
No te queda de otra. Es la vida que sigue
Renunciar. Pero hay cosas a las que debes
Dejar atrás así nunca lo hayas tenido, la vida
La vida es así, te mete en mil aprietos
Te golpea ahí donde más te duele y te obliga
A renunciar a aquello con que aún sueñas
Pero que nunca tendrás. Lo sabes, aún así
Peleas por lograrlo, malgastas tu tiempo
Malgastas tus fuerzas, y nunca llegas
Ni llegarás y lo sabes, pero sigues intentando
Soñando, deseando, gimiendo y llorando
Pero sabes en el fondo que está negado
Renunciar. Es bueno. La vida sigue, debes
Mantenerte firme en tu via, tu único camino
Tratando de tomar todo aquello que te da
Para encontrar la compañía perfecta
Que seguirá contigo hasta el final, es lo que
Creo que importa, llegar al final tomado
De la mano de quién en verdad importa
Los lujos y cosas materiales son buenas
Pero vale más un abrazo y un beso sinceros
Es lo que pienso, es lo que creo. La vida
Es un vaiven de cosas buenas y malas
Más malas que buenas, pero es lo que hay
Hoy renuncio a tantas cosas, lo material
Es más sencillo, es lo que menos me importa
Lo inmaterial, los sueños, los sentimientos
Es más difícil, pero debo ir dejando todo
Incluso esas promesas bellas
Que trae el viento, que susurra el atardecer
Que fluye por las rendijas del horizonte
Que surcan las nubes anaranjadas tras
Las gaviotas que se pierden en el infinito
Promesas tras una mirada de ensueño
Tras un roce sutil, una palabra en susurro
Un suspiro escondido, un beso tierno
Debo seguir en silencio, soy la roca que debe
Mantenerse firme en la tormenta, ante las olas
Ante la tempestad, la arena, los rayos y truenos
Hoy la vida me golpea más que nunca,
En el lugar que más me duela, en los que amo
Y debo acompañarlos en su dolor, darles
Ánimo, fuerzas, seguridad y confianza
Aunque por dentro me esté desgarrando
Aunque las fuerzas me abandonaron hace ya
Tanto tiempo que no recuerdo cuando yo
Me sentía dueño del mundo, del universo
Me sentía un conquistador imbatible
Y mis logros demostraban que era muy bueno
Pero, es tiempo del silencio, de ser duro
No mostrar mi dolor, ser una roca, solo eso
Renuncio a todo, menos a seguir viviendo