Es cierto, te has estado yendo de a pocos
Inicialmente te fuiste un día a la semana
Luego una semana al mes, luego un día más
Y así, poco a poco, solo nos hemos visto
Mejor dicho, te he visto solamente una mañana
Una sola mañana en toda la semana!
Pero, era suficiente para mí corazón enamorado
Para mi alma atormentada verte
Aunque sea por una fracción de segundo
Sentir el calor de tu cuerpo, tus manos
Quedar atrapado en tu mirada
Si, aquella hermosa y profunda mirada
De esos irrepetibles ojos negros
Que están conmigo dormido y despierto
Van a dónde vaya, donde sea los veo
Y, es cierto también, me miras divertida
Sabes que vivo por ti, que por ti muero!
Y ahora, que haré? Ya casi no estás
Ya no tendré siquiera esos pequeños momentos
Ya ni siquiera eso!
Seguiré escribiendo, veremos qué sucede
Con mi corazón, mi alma, y mi cuerpo
Veremos qué le sucede a este loco soñador
A este poeta que estaba hace tiempo muerto
Y que revivió por la magia de un amor de antología
De un amor único y verdadero, pero que ahora
Lo condena al suplicio eterno
Solo espero que, por esas cosas extrañas
Del mundo, la vida y del universo
Te quedes a mi lado y pueda
Seguir viviendo para amarte, pues ahora
Amarte es toda la razón, la única razón
Para seguir vivo... Sin ti estoy muerto
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