Suspiro con el vuelo de una gaviota solitaria
Que se dirige al horizonte en raudo vuelo
Tranquila, sin prisas, entre la mar y el cielo
Que buscas? Un nido? O al amor perdido?
Vuela gaviota, vuela. Quizá la suerte te sonría
Y la encuentres, a la que estaba perdida
Suspiro con las flores tardías de otoño
Que tercas brotan entre las hojas secas
Ya llega el invierno, no les importa
La vida es una, así florezcas en el invierno
Como este amor que ahora tengo
Que lentamente se marchita sin haber siquiera
Terminado de florecer por completo
Un niño va de la mano de su madre
Va feliz y contento sonriendo
No le importa el mundo, no le importa la gente
Solo la madre que la tiene de la mano
Que hace que se sienta muy seguro
Sin importar lo que suceda en el mundo
Corazón de poeta, corazón enamorado
Estoy que muero por estos sentimientos
Que me han desbordado por completo
Que me han hecho sentir vivo de nuevo
Pero por el cual lentamente muero
Corazón de poeta, corazón de piedra
Sería mejor que nada sientas
Que dejes de existir, que dejes de latir
Deja de soñar, deja de respirar
Basta ya de sufrir, corazón de poeta
Que las lágrimas no se borran con las letras
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