sábado, 11 de enero de 2025

Poema 575

Apenas despierto hay un olor intenso
Que me trae a la vida con gran energía 
Es inconfundible, es un sueño eterno
El despertar y sentir esos aromas
Que me transportan a lugares de ensueño 
Imposible un mejor despertar, pienso
Me acerco lentamente y en silencio al lugar
De donde proviene esa magia de olores
Y, la imagen es impresionante, increíble
Estás cubierta con una de mis camisas
Arremangaste las mangas lo suficiente para
No ensuciarlas, los botones apenas cubren
Tus pechos de antología, y estás desnuda
Se dibujan tus curvas de infarto y cantas
Veo la cafetera gota a gota, el molinillo de café
Y el olor inconfundible a pan recién horneado
Sale del horno de la cocina. Te detienes 
Volteas y me miras. Qué miras? Preguntas coqueta, mientras dejas el cuchillo en la mesa
Y te acercas a mi con aire de fingida ausencia
Acaso te gusto? Preguntas de nuevo y
Sin esperar respuesta simplemente me besas
Dura un segundo infinito, luego te apartas
Pones un gesto serio y me dices: ayúdame a retirar el pan del horno. 
Hago un gesto de afirmación militar y digo
A sus órdenes, jefa! Ríes. El olor es mágico 
El desayuno es perfecto, pero yo no puedo
Más que admirar tu figura bajo mi camisa
Y tu rostro hermoso sin maquillaje que se me antoja de diosa etérea, de pecado carnal

Ya sentados en la mesa, disfrutamos de la vida
Mantequilla, quesos, mermeladas, jamones 
Tenemos comida de sobra, pero nada se compara al olor del pan recién horneado
Al espectacular café recién molido y pasado
Y a tu imagen de diosa que me mira de singular manera. Que afortunado que soy!
No necesito nada más de esta vida!
Lo tengo todo, creo que se muere de envidia
La tierra entera ...

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