Pasan los meses y, sin casi darnos cuenta,
Empiezan a pasar los años, y tu memoria
Lentamente se aleja, dolorosamente
Tu imagen fresca y radiante se ve borrosa
El brillo de tu mirada se opaca
La suave fragancia de tu cabello
Aún está presente en el aire que me rodea
Pero se confunde con los aromas
De esta tarde de verano que está fresca
Hay música donde vaya, es cierto
Pero ya no duele tanto tu ausencia
Mi vida se ha hecho más llevadera
Ya estoy comiendo de nuevo
Ya puedo dormir sin sobresaltos
Ya puedo mirar a otras personas y no verte en ellas, ya puedo devolver una sonrisa
Y no parecer un idiota que no entiende nada
Ya poco a poco he vuelto a la vida
Hemos hecho las paces, la vida y yo
Me regaló su mejor presente
Por eso yo le escribo poemas
Pasarán muchos años, te seguiré recordando
Y es muy probable que siga de ti enamorado
Pero ya no dolerá tanto, aún hoy duele
Tu ausencia es un puñal clavado en el pecho
Tu mirada es una visión que atormenta mis sueños, el calor de tu cuerpo mata mi cerebro
Te deseo tanto que, olvidaré tu nombre solamente cuando ya esté muerto
O quizá te siga recordando después de eso...
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