Poema 258

Pasan las noches en frío permanente, que calan los huesos y roen mis sentimientos. 

No queda nada de todo eso, bello, hermoso, tan bueno que parece inexistente.

Miro mis manos, tan firmes y fuertes, capaces de conseguir todo en este mundo.

Y no pudieron retenerte, nada de lo que hice pudo evitar tu inevitable partida.

Ni siquiera mis alocadas letras pudieron prolongar tu mágica compañía.

Y ahora solo me queda el silencio doloroso que dejaste tras de ti el día que partías.

Te llevaste todo, mi vida incluida, mi calma ya la había perdido, pero también mis sueños 

No recuerdo el momento o la forma en que se fueron convirtiendo en todo tuyos

Y ahora nada me pertenece, solamente están conmigo mi soledad, mi tristeza, mi dolor

Y la inmutable seguridad de que será así por todo el resto de mi existencia 

De mi soledad absoluta y la miseria de vida que lamentablemente me queda...

Poema 257

 Aprendiendo a vivir sin ti, es difícil, sabes?

Es querer robarle tiempo al tiempo, querer volver atrás

Es mirar a todos lados en silencio, buscando

Tu mirada serena entre la bruma, en el horizonte

Es querer encontrar tus cabellos en la espuma

De las olas que acarician las arenas, las rocas

Y buscar entre las nubes tu sonrisa, aunque se van, 

Solamente se van, y nada más, nada más.

Qué difícil es vivir solo de tus recuerdos, qué difícil!

Paso el día con los ojos cerrados, no quiero mirar!

Camino como un muerto entre el gentío

Soy un autómata en el trabajo, respondo los saludos

Sonrío todo el tiempo, y festejo las ocurrencias

De todos los que me rodean. Nadie me ve llorar!

Y lloro todo el tiempo, en silencio, en agonía

En mi cueva solitaria, se funden mis gemidos

Y mis amargas lágrimas con las paredes de roca

Que me devuelve un eco lastimera, nada más!

Me cuestiono el haberme dejado llevar por esto

Que ahora me tortura de tal manera que no puedo

Siquiera llorar. Es tan doloroso que no tengo aliento

Me quedaron solo vagos recuerdos, nada más.

Y camino en silencio, con la mirada en el suelo

Las manos sudorosas en los bolsillos, en puño apretado

El cabello hecho un desastre, la barba sin afeitar

Mis ojeras dicen que no he dormido hace tiempo

y mi cansancio indica que estoy enfermo

Cuánto me gustaría que no te hubieras ido!

Pero te fuiste, y ahora debo aprender a vivir sin ti

Vivir de tu olvido, muriendo en silencio

Soportando este dolor que me tortura por dentro

Este fuego infernal que no tiene cuando acabar!

Si no te hubieras ido, nada esto pasaría, lo sabías

Pero te fuiste, y es tan largo y penoso olvidar

Que moriré amándote, soñando contigo

Aunque todo en mi te quiere de una vez olvida!

Poema 256

 La mayoría de las personas que conozco me dicen que soy exitoso, que he logrado muchas mas cosas que de mi se esperaban, que soy para muchos un ejemplo a seguir, y que aún me queda un largo recorrido por seguir y tengo mucho mas para dar. Es mentira. Soy y he sido un mal hijo, pésimo hermano, un novio deshonesto e infiel, también en mi rol de pareja, esposo, amante y compañero, soy un mal amigo, un pésimo padre que abandona a sus hijos, un profesional mediocre y pésimo consejero.

La vida me muestra cada día que soy lo peor que ha generado, y debería de haberme expulsado hace ya mucho tiempo. No sé que hago acá. Miento, miento y miento. Incluso me miento a mi mismo, con la única finalidad de sentirme bien, algo satisfecho, de justificar mis mediocridades y mis derrotas. Me jacto de mis pequeños logros, como si fueran lo más sublime del universo. Y me miento descaradamente, para seguir vivo, pues soy un cobarde de aquellos, que le temen a todo y a nada, y sobretodo le temo a morir, pues creo firmemente que soy inmortal, que soy eterno.

Es bajo estos términos que me enamoré de nuevo. no tuve la hidalguía de aceptarlo, no tuve el coraje de decirle al mundo lo que me estaba pasando. Me oculté, traté de apagar mis sentimientos, como si fuera algo malo. Y empecé como siempre con el engaño. Engañé a todos los que pude, sobre todo a los que estuvieron cerca y a los que de una u otra manera me quieren o me estiman. Me enamoré, es cierto, y ni siquiera ella lo sabe, pues este sentimiento que brotó en mi pecho se lo he insinuado a otras, para tratar de hace que se diluya, que desaparezca, que la olvide. Y no lo he logrado.

Ella ahora está muy lejos, es inalcanzable, es inaccesible. Para ser sinceros, siempre lo fue. No pude siquiera acercarme un poquito, tampoco pude suceder, era incorrecto. Y tampoco me dio algún indicio de que siquiera estuviera interesada en mi. Se fue, en silencio, y no hemos tenido mayor contacto, es como si hubiera desaparecido de la faz de la tierra. Existió? En mi torpeza he involucrado a otras personas, y algunas se han sentido muy incómodas, otras no tanto, y la mayoría lo ha tomado como un juego.

Me preocupa que alguien tome estas "bromas" que ahora hago, que las tome en serio. Para ser sinceros, ya me había pasado antes, y tuve que huir,. como buen cobarde que soy, tuve que huir para no hacer mas daño, para no lastimar ni tampoco salir lastimado. Aunque, seamos sinceros, han habido tiempos en los que he sido muy dañino, en los que he lastimado a aquellas que se dejaron seducir por mis palabras, por mi comportamiento. 

Aprenderé a vivir con este sentimiento. Estoy viejo, es tiempo de asumir mis errores y horrores, es tiempo de ser una roca y morir en silencio, masticando tus sentimientos, ahogando tus lagrimas, no dejándolas salir, y congelando a tu corazón, haciendo que se vuelva de piedra, de roca, de hielo, ponerle mil cadenas o, en su defecto, sacarlo de tu pecho y estrujarlo en tu puño hasta que deje de latir y así deje de molestar, el muy necio.

Estoy aprendiendo a vivir con solo tus recuerdos, con tu imagen, tu sonrisa, tu mirada, tus lindos ojos negros, tu cabellera rebelde que jugueteaba al viento, tu risa que contagia, tus palabras hirientes y tus poses de niña mala que me atraían como miel a una mosca desprevenida. Estoy aprendiendo a vivir sin ti, vivir solo en tus recuerdos, pero, sabes? Duele, duele como mil demonios que te laceran por dentro, duele tanto, que ya quisiera estar muerto.

Poema 255

Y así van pasando los días, pasan las horas, los minutos y segundos, que cada vez martillan mi cabeza, mi corazón y mi alma, recordándome que te has ido para nunca regresar. Una triste melodía se escurre entre mis dedos, viene por la ventana desde el cielo gris que ya no puede llorar. Las suaves notas son como cuchillos que cortan mi piel, mis nervios se ponen más y más tensos, y en mi pecho un llanto se ahoga en un inmenso mar de lágrimas en desconsuelo que ya ni siquiera quién brotar.

Esto no es vida, esto es soledad! Una inmensidad oscura, fría, húmeda que huele a moho, que se siente como guijarros y espinas y que suena a infinito vacío, donde el eco me devuelve mis quejas y lamentos, aunque entre ellos escucho tu nombre completo, que ya me he cansado de repetir hasta la saciedad. Qué doloroso es sentir tu ausencia, qué difícil aceptarlo, que triste es negar la dura realidad!

Y me repito una y mil veces: si no te hubieras ido, si no te hubieras ido, que feliz sería! Qué feliz! Qué feliz... Más, ya no estás, y solamente me quedan segundos infinitos de cruel y dolorosa agonía, mientras vanamente espero que vuelvas, quiero volver a ver tu preciosa imagen en esa puerta, quiero oír de tu boca que aún me quieres, y quiero gritarle al mundo entero que te amo sin límites, sin razones, sin esperar nada a cambio, te amo hasta la eternidad!!!

Poema 254

Engañarse a si mismo, vaya error. Tenía alguna posibilidad contigo? No! La respuesta es tan simple y dolorosa que me hace pensar en lo obtuso de mi vida, la miseria que me tocó vivir. Para qué engañarse? No tiene ningún sentido seguir esperando por ti. No tiene ningún sentido, no. Era mejor seguir de largo, era mejor dejar pasar, era mejor.

Ahora que no estás me vuelvo a preguntar: Tenía alguna posibilidad contigo? NO!

Me quedan tus recuerdos, tu mirada profunda y enigmática, tus manos temblorosas y tus labios ansiosos. Me engañé diciendo que cambiarías, que notarias mis deseos, mi amor desesperado, mis deseos de tenerte para siempre conmigo. Quise que fuera así, me engañé diciendo que así sería.

Ahora debo aceptar mi triste realidad. Fuiste solo fantasía de este loco que solo soño con tu amor. Solamente fantasía de un mágico sueño que nunca despertó...

Poema 253

Las noches suelen ser los momentos más difíciles de superar. En el silencio de mis frías sábanas, en la cruel tortura de los sonidos opacos del universo dormido, en la tétrica presentación muda de mis sueños, tu imagen vivida y dolorosa me clava mil dagas en la espalda, me desgarra lentamente y vierte lava ardiente sobre un témpano de hielo en mis maltratados huesos. La noche es el momento cuando tu ausencia se hace más notoria, donde cada milímetro de mi piel pide a gritos la tuya, y donde mi pecho asé aplasta contra mi espalda y así trata todo el cuerpo de quitarle aliento al corazón, el único culpable de todo esto.

No hay más que decir, solo queda llorar en silencio, solo queda quejarse en silencio ante el universo. Nadie en este mísero planeta entiende lo que siento. Nadie. Nadie. Ojalá me escucharás, ojalá me leyeras, ojalá siquiera hubieses notado mi existencia. No es así. Estos mis sentimientos son solamente para mí. No. No. No. Es todo lo que escucho a donde vaya. No hay nada más que hacer.

Adiós. No me queda ya nada aquí. No hay nada para mí. Me iré a mis sueños, que es lugar donde te tuve, dónde fuiste solo mía, donde pude realmente vivir. Nadie acepto este amor, nadie, solo yo. Por eso he de partir, pues esta vida sin ti es lo peor que me pudo suceder. Qué debo hacer? Tienes alguna respuesta?

Poema 252

Te extraño. No es novedad, verdad? Lo novedoso sería que hubiese un día en que no pensara en ti. Qué difícil es vivir así, nunca pensé que llegaría a estar así, parece mentira, es algo irreal lo que estoy viviendo en este momento. Mi vida no es mi vida, es una mala película que nadie quiere ver, menos yo. Es que no estás tú! A quién le interesa está mala comedia de mal gusto?

Qué son los días sin ti? No lo sé. Es un camino vacío, sin sabores, sin colores, solamente grises opacos, llenos de tristezas y soledad. Para qué seguir? No quiero seguir. No tengo ganas de nada, ni siquiera el sexo o el licor borran tu memoria. Trato en vano de reemplazarte, busco otros ojos, otras manos, otros cabellos con aroma que embriaga, otros cuerpos que me den su calor. Nada es suficiente. Nada se parece siquiera un poquito a lo que fuiste tú. Nada se parece a ti.

Mi cuerpo se congela, mi corazón es ahora un témpano helado, con toda la sangre detenida, sin vida, sin ganas de latir. Mi alma se cansó de llorar, ya no hay más lágrimas. Los lamentos se los llevó el viento. No tengo más nada, solamente sufrir y recordar todo eso hermoso y bello que pasamos juntos. Solo recordar me queda, eso y nada más. A qué hora llegas, querida dama de la muerte? Y el barquero, por qué no me dejas subir a tu velero de muerte? Ya no quiero seguir acá. Me duele tanto tu ausencia, que solo espero morir, lo deseo, lo sueño, lo anhelo. Ya no quiero vivir si no estás aquí!