Silencio, no hay más que silencio en mi cueva
La oscuridad reina, es la dueña y señora
Y el calor me destruye las entrañas, duele
Y mi piel siente cada segundo cual dagas
No puedo pensar en otra cosa, solamente
En lo dichoso que fui a tu lado, algún día
Los segundos golpean mis sienes con dureza
No hay lástima a mis pobres sentidos
Las horas caen como moles sobre mi alma
No me quedan ya fuerzas para otro golpe
No hay ánimos para nada, solamente queda
El frio de la silenciosa y oscura cueva
Silencio, cómo dueles! Necesito romper
Estos barrotes que no me permiten respirar
Oscuridad, me estás destruyendo. Por qué?!
Te fuiste, te lo llevaste todo, nada queda
Ahora solamente el silencio, la noche
La húmeda soledad son mis compañeras
Hasta que vuelvas. Volverás?!
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