martes, 10 de septiembre de 2024

Poema 234

 Romántico empedernido, enamorado del amor, enamorado sin razón, enamorado sin sentido. Hoy he perdido, hoy con mi último manotazo de ahogado le he dado el tiro de gracia a un amor que aún no había nacido por completo. Aún así, lo he hecho, sabiendo que existía una mínima posibilidad de salvar este mágico sentimiento. Pero, no lo logré, he quemado mi último cartucho, y ahora solo me queda el silencio.

Camino entre las sombras, el sol hace buen rato que no alumbra mi sendero. La oscuridad de la noche no puede ser vencida por la tenue luz de la luna y las estrellas. Todo está en tinieblas, para mí la vida ya no es bella, es solamente una tortura eterna, una cruel y vil miseria. Aún así camino, entre las hojas secas, las flores muertas, y las avecillas que ya no vuelan, que en silencio esperan que pase mi triste silueta. Hasta las olas están quietas, y las rocas mas mudas que muertas.

Romántico enamorado, que has hecho? Solo te espera un mar infinito de tristeza, de soledad eterna, de oscuridad plena. Cierra los ojos, quizá en tus sueños alcances esa inalcanzable estrella. Pobre poeta, tus letras están para siempre muertas, tu corazón se va convirtiendo en piedra, y tus sueños en blanco y negro se están borrando antes de siquiera intentar despertar a este planeta. Camina poeta, que la dulce muerte te espera tras la puerta. Camina poeta, que ya no son necesarias mas letras...

Poema 233

 Ya nada importa en esta vida. Te has ido, te cerré la puerta, puse un candado en ella, y eché la llave a lo más profundo del océano. Te has ido, tampoco quieres volver, y es que, no estuviste mucho tiempo acá. Solamente fue un pasatiempo, una cosa superficial, con la que te divertías, con la que pasabas el rato, para evitar el aburrimiento. No fue así para mi. Mis sentimientos se elevaron por encima de mis deseos, de mis cautelas, de mis razones. Me perdí por completo, pero, fue tan mágico, tan bello, que no me arrepiento, en absoluto, no me arrepiento.

Ahora solo me quedan recuerdos de algunos pequeños y cortos momentos, cuando tocaba el cielo con las manos, cuando flotaba en un universo etéreo, donde no habían cadenas, sin limites, sin prejuicios, sin nada que nos detuviera, que nos prohibiera todos estos sublimes sentimientos. Ahora son solamente recuerdos que están atrapados en mi corazón y en mi alma que solamente sueña. 

Me tengo que ir. Esta vida no me interesa, no estás tú. Seguiré en este camino de dolor, de soledad, de silencio absoluto, seguiré, pues a lo mejor, quien sabe, quizá, te encuentre de nuevo y, por esos azahares de la vida, vengas a mi, buscando cobijo, buscando consuelo. Incluso en ese momento, estaré esperando lo que queden de tus caricias, lo queden de tus besos, y me conformaré con ello.

Por el momento, adiós, estaré buscando el final del camino, de un camino que no me interesa seguir, solo quiero terminarlo y ya. No hay más nada para mi en esta vida en soledad, en tristeza, en amargos lamentos. Adiós, espero que te vaya bien, espero que encuentres esa felicidad que hoy yo no tengo. Adiós.

Poema 232

 Y ahora, que será de ti? De mi, no es gran incógnita saber lo que será de mi vida, pues de antemano sabes que te seguiré amando mientras exista un sol sobre la tierra, y en las noches estén la luna y las estrellas. No necesitas preguntarle a nadie, basta con escuchar al viento que te traerá dulces melodías compuestas por mis mas tristes lamentos, basta con esperar el amanecer y ver en el horizonte mis sueños, que vuelan al firmamento, bastará con ir a la playa, y el océano inmenso te recordará lo mucho que deseo un abrazo, una caricia y un beso.

Por donde vayas estarán mis sueños en letras, en versos, incluso en tus sueños estarán mis mas alocados deseos. Todo te recordará no a mi, sino a este gran amor que hoy por ti yo siento. Dedicaré mi vida entera a cantarle a estos bellos sentimientos, mágicos, hermosos, eternos. Cantaré de mil y un maneras todo esto que me hace sonreír, que me regala melódicas canciones en las tormentas mas violentas, que me regala pasiones en todos y cada uno de mis sueños.

Pero, que será de ti? Sabes a donde irás? Qué camino vas a tomar? Quién irá contigo? Llegarás a amar? Quiera el destino y la vida que así sea, que logres encontrar a esa persona especial que te robe la paz, la calma y te regale mágicos sueños. Sabes? es espectacular, es único, una sensación indescriptiblemente bella el estar enamorado, el soñar con una mirada de ensueño, con unas mágicas manos, con unos labios apasionados y bellos, y con un momento de entrega total, así sea irreal, así no sea verdadero. Es mágico, es la vida misma, no cambiaría por nada estos mágicos sentimientos.

Espero encontrarte una vez mas, saber de ti, saber cómo te ha ido. Y quizá, si se da el azar del destino, pueda tomar tus manos, atraerte hacia mi, y por fin robarte ese tan anhelado negado beso. Seguiré esperando eternamente por este momento, así se me vaya la vida escribiendo versos, soñando con que te poseo. Solamente eso, solamente encontrarte una sola vez más, de nuevo.

Poema 231

 Que por qué te amo tanto? Pregunta tonta, vana, sin respuesta posible, que ni siquiera intentaré tratar de explicarlo. Solo te amo, nada más que eso, son solamente sentimientos que brotan de mi pecho, que afloran en lo mas profundo, allá donde duele tanto, y se desparraman por todos lados, y me hacen sentir una lava que me desgarra sin compasión por completo. Cómo quieres que te diga todo lo que yo siento? No hay palabras en ningún vocabulario que puedan explicar todo esto.

Te vi de nuevo, pensaba que ya no sentía nada por ti. Me equivoqué, de cabo a rabo. Cuan equivocado estaba! Apenas sentí tu presencia mi corazón voló a algún lugar mágico, de donde no ha regresado. No quiere volver, no me hace caso. Mi alma, despavorida, alzó raudo vuelo, y ahora está perdida, en la profunda oscuridad del infinito eterno. Y yo, sigo en mi cueva, solamente suspirando, recordando la magia de tu mirada, aquellos encantadores ojos negros.

Te amo con locura, no existen razones para todo esto. Solamente se que lo que me queda de vida te la dedicaré a ti,por completo. No importa si no me miras, si no me escuchas, si ni siquiera te interesa mi existencia. Yo te amo, y pasaré lo que me quede en este tiempo cantando con mis torpes letras en mis mas torpes aún versos, cantando todo el amor que hoy yo por ti siento. Llegarán mis melodías al cielo, a los infiernos, a los oídos del mundo entero, no me importa, solo quisiera que, por un minuto, escucharas aunque sea solamente uno de mis locos versos. Solo uno, te lo pido, te lo suplico. Dale un momento de alegría a este poeta que muere por ti y que por ti vive en eterna agonía.

Poema 230

 Creer que, porque amas, te tienen que amar, es el error más frecuente del poeta que se enamora y entrega su corazón, su alma, sus versos, su vida entera convertida en letras a la persona a la que idolatra. Pero no acepta, no entiende la razón de la negativa de quien es la causa de sus desvelos, de sus locas emociones, de sus pasiones en desconsuelo. Oh, poeta, que amas sin razón, sin remedio, déjate llevar por el tiempo del olvido, deja atrás todos estos sentimientos, ya no escribas más, que tus versos caerán en un saco roto, en el abismo vacío del cruel olvido.

Yo también amo en este momento, y dedico mis febriles letras en apasionados y desquiciados versos, y escribo sin parar con la vana esperanza de lograr la atención de aquella a la que tanto y tanto quiero, o, en su defecto, de que sean mis versos el lugar donde lentamente muera este cruel, aunque delicioso, sentimiento. Amo con locura, sin razones, sin esperanza alguna, y solamente quiero plasmar en letras lo que ahora yo siento.

Nunca la tuve en mis brazos, nunca fueron mías sus caricias, menos sus besos. Nunca siquiera tuve su atención plena, y jamás, nunca mostró interés alguno hacia mis alocados sentimientos. Solamente era yo, quien en noches de insomnio infinito, soñaba y soñaba despierto, con una magia que nunca se hizo realidad, con un deseo irremediablemente perdido, con un sueño etéreo que nunca logró despertar.

Ahora me tocó regresar a la realidad, y poner los pies sobre la tierra, de nuevo. Es muy duro, es cruel, es insensible, vivir la vida así es una agonía sin remedio. Pero, es lo que tenemos, el deber obliga a mantenerse frío, a mantenerse cuerdo, aunque no lo quiero. Debo seguir, a nadie le importa mis sentimientos, nadie se interesa por mis letras en sufrimiento, todos esperan que sea una roca que les de apoyo duradero, todos piden de mí el máximo vital esfuerzo. No es tiempo de poesía, no es tiempo de amores, no es tiempo de sentimientos, no hay espacio en la terrenal vida para los versos.

Así que, toca enterrar mis sentimientos, en lo más profundo de mi pecho. Ponerles mil candados, quizá buscarlos en las noches solitarias, o dejarlos bailar libres en mis sueños. Quizá escribir en uno que otro momento, quizá, solo quizá seguir soñando con la vana esperanza de que todo será diferente en algún otro espacio tiempo. Pero hoy, hoy te he perdido. Hoy he perdido un amor que solamente existió en mi mente, en mi corazón, en mi pecho, que solamente fue un sueño, un mágico sueño, es cierto, pero, al fin y al cabo, solamente un sueño de un soñador empedernido, que nunca quiso estar despierto.

Poema 229

 Pensé que ya te había olvidado, pensé que te había superado, que ya podría mirarte de frente sin turbarme, que podría hablar contigo libremente sin necesidad de ocultar mi mirada, sin ocuparme de mis manos, de mi cuerpo, de mi forma de mirarte. Me equivoqué! Oh, dioses todos, que hermosa que estabas cuando te encontré! No podía creer tanta belleza en el universo, no podía entender lo que mis ojos veían, menos lo que sintieron mi corazón y mi alma.

Fue solo un momento, pero suficiente para alterar mi vida entera. Me volví nuevamente torpe, nuevamente me temblaban las manos, mis ojos no me obedecían y mi corazón desbocado quería salirse de mi pecho. Qué me has hecho? Tú, nada, lo sé. No has hecho nada para que me suceda todo esto. Solamente me miraste un momento y destruiste mi tranquilidad, mi calma, mi vida completa se ha convertido en un desastre completo.

Te evité, que bueno que pude hacerlo, ya que de no haber sido así no se que pudiese haber hecho. No soy ya dueño de mis acciones, de mis deseos, de mis sueños. Todos mis pensamientos son para ti, soy tuyo por completo. Y ahora le pregunto al universo, a los cielos, a los infiernos: Soy culpable? Por amarte así, soy culpable? Solamente quiero justificar ante todo el mundo este mar de sensaciones y emociones que has despertado en mi, y solamente sueño con el día en que quizá pueda tomarte de las manos, abrazarte contra mi pecho y besar esos labios de ensueño.

Soy culpable por no poder controlar todo esto que ahora me está destruyendo lentamente. Y nadie me entiende, ni siquiera yo entiendo por qué y para qué sucede todo esto. Se que ni siquiera te intereso, ni siquiera tengo la más mínima posibilidad de estar a tu lado, tienes otros objetivos, otros sueños, y, que bueno! Con el tiempo tu imagen se hará cada vez mas borrosa en mi corazón, en mi pecho. Dejaré de soñar quizá algún día con que te abrazo y te beso. Dejaré atrás todos estos locos deseos y sueños. Solamente espero que encuentres a alguien que te quiera aunque sea un poquito de todo esto que hoy yo por ti siento. Serás la mujer mas dichosa del universo, te lo aseguro. 

Ahora es tiempo de partir, de ocuparme del desastre de vida que tengo. Sobrevivir, lamer mis heridas, curar mi corazón malherido, remendar mi alma que camina muerta, destrozada, hecha un espantajo, y cargar la cruz de todos aquellos que tanto quiero. Es pesada, sabes? A veces es demasiado duro estar vivo. No importa, este amor que ahora por ti siento me sirve como fortaleza para seguir mi camino, sin mirar atrás, sin dudas, avanzar solo soñando y escribiendo todo aquello que fue bello, hermoso en su momento, y que ahora solamente es un delicioso, pero tan doloroso, recuerdo en mágicos sueños.

lunes, 9 de septiembre de 2024

Poema 228

Tenerte en mis manos de nuevo. Qué sensación gloriosa es poder sentir nuevamente el calor de tu cuerpo! Las palpitaciones van a mil por segundo, la respiración es ya un lastimero gemido, la visión se vuelve borrosa, los labios tiemblan, hay una ligera sudoración en las manos. No puedo creerlo, te tengo nuevamente cerca a mi, más aún, puedo besar tus labios.

Ese instante se hace infinito, se diluye la realidad en una nube brillante que me adormece, hay una música que me aturde, que hace que pierda la noción del tiempo, de las distancias, de la realidad misma. No sé qué decir. No encuentro la o las palabras que sean adecuadas para este momento de gloria. Solamente sonrío. Con una mueca cómica, con un gesto divertido. Solamente sonrío.

Tu vocecita casi insolente me saca de mi estupor. Estás bien? Preguntas divertida. Sabes que ni siquiera yo sé lo que siento en estos precisos momentos. Te miro en silencio, la sonrisa boba no se ha ido de mis labios. Si, es todo lo que digo. Me besas de nuevo, y nuevamente yo estoy perdido. 

Dioses del Olimpo! Vengan en mi ayuda, estoy cayendo en un abismo inconcebible de placer infinito. Me han elevado a los siete cielos y a los infiernos en un solo instante mágico. Pierdo control sobre mi mismo, y, sin mediar explicaciones o pedir permiso, simplemente te aprieto contra mi cuerpo, mientras mis manos se apoderan de tu espalda, tu cintura, tus caderas y mis labios se pierden en ese infierno de pasión que son tus besos...