Entras cantando a la alcoba
Traes un café en una mano
Y en la otra un plato pequeño
Sabes mis gustos, pero, más aún
Sabes lo mucho que me gustas
Tienes puesta una de mis camisas
A través de ella disfruto de tu desnudez
El cabello suelto, los labios rojos
Insinuantes, primorosos
Me invitan a un festín de placer
Y deseo desenfrenados
Antes de poder coger lo que traes
Besas mis labios y luego
Me ofreces tus pechos
Que delicia! No me reprimo
Pero voy con cuidado
La taza está caliente, lo sé
Por el vapor que de ella emana
Basta, me ordenas
Y ahora sí me ofreces lo que traes
Los recibo con beneplácito
Me sirvo los huevos revueltos
El tocino aún caliente
Un buen sorbo de café amargo
Sabes mis gustos, pero más
Sabes que me gustas tanto...
Dejas que uno de tus hombros
Quede descubierto
Me miras de esa forma que solo tú
Sabes hacerlo, guiñas un ojo
Deslizas una de tus manos
Por tus pechos, tus pezones se erizan
Te acercas a mi, me tumbas en la cama
Y ahora sí viene el verdadero regalo
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