Muero un poco todos los días
Desde que te alejaste de mi vida
Pero, antes de morir quiero que sepas
Que te amé desde el primer instante
En que llegaste a mi puerta
De ese momento que entrabas, mientras
Sonriente me mirabas coqueta
Y jugabas con tu cabellera
Y me invitabas a perderme
En esa tormenta de pasiones
Prohibidas
Te amé desde el primer día
Moriré amándote
Y esperando que regreses
Aún después de la muerte
Y, a pesar de todo el dolor
De todo el sinsabor de perderte
Si volviese a encontrarte
Igual te amaría, pues era
Mi destino encontrarte
Y así lo quiso la vida
Y no opuse resistencia
Oh! Que hermoso es amarte
Y morir de amor por ti
Es una hermosa muerte
Es una agonía embriagante...
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