Con la vaga sensación de una lenta agonía
Vida mía, fuiste buena conmigo
Y me diste de todo, no lo niego
Quizá fueron más las tristezas y lamentos
Que los momentos de felicidad y alegría
Pero fueron tan y tan buenos que
Ahora te entiendo y te agradezco
Vida mía, ya estamos de salida
Aunque a mí me parece ayer
Que era un niño pequeño
Con infinita curiosidad
Y miles de sueños
Aún cuando me veo en el espejo
Siento que soy el mismo
Solo un poco menos de pelo
Y una que otra arruga
Pero en esencia sigo siendo yo
Ese niño hambriento de conocimiento
Me ha tratado muy bien
Nada me debes, me lo diste todo
Pero aún espero mucho de ti
Aún espero muchos abrazos
Y muchísimos besos
Vida mía
Sigue así
Y seguiremos a mano
Hasta el final mismo de mi tiempo
No hay comentarios.:
Publicar un comentario