Una tardecita de verano, de un verano que casi se ha ido,
Iban cogidos de la mano, ella con él, con sus sueños de niños.
Él va hablando, mueve las manos, va soberbio el tipo
Hablando de sus hazañas, de sus logros y sus conquistas
De un pasado que ya fué, y que quizá aún para él no se ha ido,
Y ella va en silencio, sonriendo, disfrutando del camino...
Ella cantaba en silencio, y sus ojos bailaban dichosos,
Adorando a aquel que miraban, como si nunca hubiesen visto
Algo mas bello y hermoso, algo que les regalaba aquel gozo
De sentir lo que sentían, al estar de la mano, esa tarde, de verano
De un verano que ya se iba, o que quizá ya se había ido...
Ahora los dos cantan, aunque en silencio van por el camino
Los dos le cantan a la vida, al amor, y al haberse conocido.
Cantan una hermosa canción, que no se oye a lo oídos
Sino solamente lo oye el corazón, de aquél que se enamora
Y que enamorado puede sentir, lo que no perciben los sentidos.
Ella va cantando, una hermosa melodía, y siguen su camino
Las flores hacen el coro, las estrellas ponen la melodía,
Las olas y el viento acompañan la maravillosa sinfonía,
Y los Dioses eternos, se alegran con la dicha
De dos corazones que se aman, y que disfrutan en silencio
De un bello amor, que los atrapa, y los lleva directo al paraíso.
Iban cogidos de la mano, ella con él, con sus sueños de niños.
Él va hablando, mueve las manos, va soberbio el tipo
Hablando de sus hazañas, de sus logros y sus conquistas
De un pasado que ya fué, y que quizá aún para él no se ha ido,
Y ella va en silencio, sonriendo, disfrutando del camino...
Ella cantaba en silencio, y sus ojos bailaban dichosos,
Adorando a aquel que miraban, como si nunca hubiesen visto
Algo mas bello y hermoso, algo que les regalaba aquel gozo
De sentir lo que sentían, al estar de la mano, esa tarde, de verano
De un verano que ya se iba, o que quizá ya se había ido...
Ahora los dos cantan, aunque en silencio van por el camino
Los dos le cantan a la vida, al amor, y al haberse conocido.
Cantan una hermosa canción, que no se oye a lo oídos
Sino solamente lo oye el corazón, de aquél que se enamora
Y que enamorado puede sentir, lo que no perciben los sentidos.
Ella va cantando, una hermosa melodía, y siguen su camino
Las flores hacen el coro, las estrellas ponen la melodía,
Las olas y el viento acompañan la maravillosa sinfonía,
Y los Dioses eternos, se alegran con la dicha
De dos corazones que se aman, y que disfrutan en silencio
De un bello amor, que los atrapa, y los lleva directo al paraíso.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario