Todos gritamos en el primer instante
Tengo los ojos cerrados, tengo pavor
Ya no siento al corazón, se detuvo
La bulla en derredor es de quejidos
Lastimeros todos, de miedo y desolación
Que poco a poco se van apagando
Abro los ojos, con más miedo que cautela
Seguimos cayendo, cada quien a su manera
Algunos hacemos gestos incomprensibles
Otros las manos juntas, como rezando
Aceptando su destino sin pedir explicaciones
Con la serenidad que les otorga su fe infinita
Otros tratando de volver, gritando
No entienden que no hay retorno, aún así
No dejan de dar pelea incluso en este camino
Sin retorno, en esta caída infinita
Aparecen luces de algún lado, toman
A aquellos con rostros y posturas serenas
Flotan a su lado, les abren los ojos
Ambos sonríen, y desaparecen de mi vista
Busco las luces, ninguna se acerca a mi
Todas me evitan, trato de moverme
Adopto también una postura serena
Quizá ese es el truco, pero aún así
Mi curiosidad me gana, y no puedo
Mantener los ojos cerrados, no puedo
No hay comentarios.:
Publicar un comentario