No hay nada que no puedas
No hay nada que no sepas
No hay nada que no tengas
Eres la única poderosa
Que puede hacer conmigo lo que quiera
Señora mía, no es una queja
Tampoco un lamento
Es más bien una alegría de vida
El saberme su servidor y esclavo
Soy feliz estando a sus pies
No quiero irme para ningún lado
No quiero otra cosa más que
Complacerla en todos y cada uno
De sus caprichos descabellados
Dígame a dónde voy
Iré para ese lado
Dígame qué desea
Lo conseguiré a cualquier precio
No necesita más que decirlo
Y le bajaré la luna y las estrellas
Y las pondré a sus pies
Si es eso lo que ha deseado
Mi ama y señora, la amo
Mis sentimientos son alocados
Pero son por usted y para usted
Y yo disfruto cada segundo
A su lado
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