Todas estas sensaciones que me embargan
Y que brotan por cada poro de mi piel
Todos estos suspiros silenciosos
Todos mis torpes pero sinceros versos
Son lanzados al viento, se hacen efímeros
Y con ellos se van mis sueños, mis anhelos
Y esa vaga esperanza que tengo
Que vuelvas a mi algún día
Si, aún lo espero. Incluso creo
Que te seguiré esperando en esta vida
Aún sin esperanzas, en doloroso silencio
Masticando con amargura mi frustración
Aceptando mi derrota, pero aún enamorado
Aún perdido en tu mirada, aún esclavo
De esos ojos negros de antología
Por los que suspiro y me mantengo vivo
Solamente soñando con verte de nuevo
Y quizá lograr que me sonrías
Y quizá lograr tomar tus manos
Y quizá abrazarte y perderme en la fragancia de tus cabellos
Y morir en el calor de tu cuerpo
Y quizá obtener ese eternamente negado beso
Nadie me escucha. Aquellos a los que les cuento
Lo que me está pasando, lo que por ti siento
Me llenan de mil y un consejos sobre la vida
Sobre como hacer lo correcto
No necesito consejeros ni consejos
Necesito un amigo que me entienda
Y que me acepte como soy. No lo tengo
Seguiré escribiendo. Oh, lector
Cuando leas esto considerate afortunado
Por no pasar por lo que yo estoy pasando
Solo y triste, como un miserable desafortunado
Me niego a hacer daño. Por eso soporto en silencio
Hasta que todo se haya acabado
Pues estos sentimientos se acabarán únicamente
Cuando deje de soñar, cuando esté muerto