martes, 19 de marzo de 2024

Por qué te quiero tanto?!

Por qué? Dime por qué?!
Por qué cuando te veo sonrío, aunque no me mires, ni siquiera un poco...
Por qué suspiro y suspiro a cada instante? 
Por qué estás todo el día conmigo, aunque sea ésta solo tu imagen, y tú ya te has ido?
Por qué esas mariposas que me han quitado el hambre?
Por qué me falta el aire? 
Por qué mi pecho ya no late?
Por qué las noches son día, y los días oscuros?
Por qué por donde vaya te veo, si no estás?
Por qué la brisa del mar me trae tu aroma?
Por qué las olas me gritan tu nombre?
Por qué en el horizonte solo veo tus ojos?
Por qué te veo en mis sueños, incluso estando despierto?
Por qué no corro, vuelo si es a tu encuentro?
Por qué no puedo ya mirarte?
Por qué me duele tu presencia?
Por qué muero por tus labios?
Por qué quiero perderme en tus cabellos?
Por qué?! Por qué te amo?!
Dime por favor, por qué me pasa todo esto?
Dime por qué?! Por qué?!

Te amo tanto, que quisiera saber, por qué me sucedió todo esto? 
Por qué?! Dime por qué te quiero tanto, dime por qué?!

Señor don Dinero

- Qué quién? Qué es lo que quiere? 
- Buenas tardes señor Don Dinero, solo le pido un minuto...
- Qué?! Quién es este taimado?!
- Un loco que dice ser poeta, y quiere con usted hacer un trato...

Por un instante el poderoso don Dinero deja de ver sus cuentas tras sus gafas doradas, sonríe a medias con su habano entre los dientes, coge su vaso de cristal caro y dando un trago del licor más fino, se ríe...

- Un trato?! Conmigo? Y que puedes ofrecerme tú, mentecato, a mi que todo lo tengo y todo lo puedo... Momento, primero dime qué es lo que quieres? Mucha riqueza acaso? Puedo hacerte poderoso más que los dioses, puedo comprar ciudades, levantar y destruir imperios milenarios, compro personas, compro voluntades, compro lujos y vanidades, compro vidas, compro sueños, compro todo lo que existe, ha existido y existirá en este mísero, pero mío, planeta...

Silencio, esperan que hable
- Lo se lo entiendo, lo que le pediré no creo le cueste mucho en sus cuentas, siendo usted el ser más poderoso de todos los tiempos (veo que asienta orgulloso y sonriente), mire quiero hacerle un intercambio....

- Y que tienes tú que pueda interesarme?
- Muy poco la verdad: tengo mi libertad y mi vida para entregársela, tengo mi alma...

- Tu alma? Ja, ja , ja!!! No hay valor monetario para esa cosa que llamas "alma", acá no vale ni una sola moneda. Entre nos, dicen que un tío colorado con cuernos, que reinaba o reina en los infiernos, las recibía gustoso, pero ahora tiene tantas y tantas que las colas para ingresar allá son eternas, incluso me parece que ahora para entregar tu alma hasta tienes que pagar.... En fin, que más traes, que pueda interesarme...

- Hmm, traigo acá algunos versos...

Por una fracción de segundo la habitación del señor poderoso explota en estrepitosa carcajada, todos se toman la panza de tanto jolgorio, ríen a mandíbula batiente...

- Poemas? Poesía?! Estás loco de remate, pobre necio. Eso no vale ni un medio. A decir verdad, creo que en la actualidad el papel vale más si está en blanco que si viene con esas letras. Nadie lee poemas! Es más, creo que ahora tienes que pagar para que te lean... Vale, creo que asustamos al pobre espantajo... Bueno, nada traes, tu vida no me interesa nada, pues todos en el planeta son mis esclavos, y tu libertad, hmm, quizá podría usarte en algo, pero, vamos,  qué es lo que me pedías?

- Solo una cosa, señor todopoderoso don Dinero, solo quiero que, aquella a quién amo, también me ame...

Silencio...

Toda la habitación queda paralizada en un instante. Las monedas no tintinean, algunas quedan suspendidas en el aire, los contadores están estupefactos, miran por sobre sus gafas, el aire queda petrificado, y la imagen del poderoso don Dinero es impactante: tiene una mano al aire, la otra deja que poco a poco el licor de su lujosa copa se derrame, el habano se escurre de sus labios, y su mirada es casi tierna, y hasta se nota desconsuelo...

- Pobre idiota, necio, torpe, iluso poeta. Puedo comprarte amigos, puedo comprarte amores postizos, puedo llevar las personas más bellas a tus aposentos, puedo todo eso, pero lo que me pides, lo que me pides, no tiene precio, no está a la venta, no existe ninguna oferta...

Bajo en silencio la cabeza. He intentado todo, ya nada me queda. Agradezco con un pequeño ademán, y rompiendo el silencio de la habitación, me dirijo hacia la puerta...

- Espera, me dice el poderoso don Dinero, ya con voz de mayor benevolencia, espera loco soñador, desquiciado poeta. Toma una moneda, te la has ganado por tu osadía, es para el barquero, pues, a este paso, ni siquiera tendrás para pagar el viaje final, que, cómo según yo veo, está para ti muy cerca...

Salgo en silencio. Las hojas donde están mis torpes versos son arrancadas de mis manos por las aguas, el fuego y los vientos, y son fáciles víctimas de todos los elementos. Miro la reluciente moneda, es brillante y hermosa, inclino suavemente mi mano y la moneda rueda sin destino, hasta perderse de mi vista...

Para que quiero al barquero? Para qué necesita mi alma el cielo o el infierno, si en ninguno de esos lugares tendré tus manos, tus bellos ojos negros, tu cabellera de ensueño, tus labios apasionados y tus negados besos?

Caminaré entre la vida y la muerte, navegando en silencio los inclementes mares del espacio tiempo, cual espectro viviente, y seguiré regalando mis versos de amor al aire, al fuego, a los vientos, sin importarme un rábano si alguien los lee, pues son para ti, son solo para ti, todos ellos....

Hay un corazón...

Hay un corazón acá, en mi pecho
Que late en silencio, pero desbocado
Corazón de loco enamorado!
Para ya, corazón! Para ...
No ves que puede hacerte daño
Tanto traqueteo, tantas sensaciones
Tantas emociones, y tanto sufrimiento...

Mil suspiros se ahogan en mi pecho
Y mi corazón los toma feliz, satisfecho
Estoy vivo! Me grita en silencio
Ahora siento eso que habíamos perdido
Siento el amor por todos lados
Pues somos uno, tu y yo,
Tu, un loco soñador, 
Y yo, un corazón enamorado...

Suspiro otra vez, y otra... Y otra!
Basta ya de suspiros!
Corazón enamorado, para ya de latir
No ves que me has quitado el sueño
Ya no duermo, no como, casi no respiro
Veo su imagen por todas partes
Y, si cierro los ojos, ahí están los de ella
Profundos, fieros, seductores, hermosos

Para ya corazón, para por favor...
Te lo piden el alma, la cordura, la razón
No llegaremos a ningún lado
Con estos sentimientos alocados

Hay un corazón enamorado
Que no hace caso a nadie, solo existe
Para embriagarse de sus sentimientos locos
Y para atormentar a un soñador
Que se dejó llevar por sus deseos, sus sueños 
Y que quizo lanzar sus palabras al viento 
Que quisiera llegaran a ser versos plenos...


Que es poesía?

Que es poesía?
Me preguntas coqueta
Riendo suavemente mientras
El viento juguetea con tus cabellos
Y tratas de ordenarlos con tus manos tersas

Que es poesía? Poeta? Estás ahí?

Suspiro...
Poesía, amada mía
Es cuando yo te miro
Y cuando, por esas cosas increíbles
De la vida, tú también me miras ....

Dioses del Olimpo!
Vengan a disfrutar todos de tanta belleza!
Hay unos ojos apasionados, fieros
Una mirada profunda y soñadora
Que por fin, después de tanto tiempo
Se dirijen hacia a mí en silencio
Y, en una cómplice sonrisa, me dicen:
- Yo también te quiero, loco poeta....

Qué has hecho de mí

Qué has hecho de mí, vida mía?
Loco de pasión, loco de amor, loco de deseo
Sólo quiero que lo sepas
Siento que si no estás tú
Simplemente moriría!

Mis días otrora grises, ahora brillan
Nuevamente tengo sonrisas
Como menos, las mariposas no me dejan
Estoy lleno de vitalidad, si, de esa
Que pensaba era ya solo un recuerdo
De tiempos pasados que no regresan
Y, así no lo quieras, me has devuelto
Al viejo tintero y a las letras!

Mi corazon se desborda
Está en llamas mi alma
Me regalas suspiros por donde vaya
Y cantan, oh! Todos cantan!
Por lo bella que es la vida!
Por todo el amor que me embarga
Y por la promesa que, en cercano día,
También digas que me amas
Y que te encanta mi torpe poesía...

Una caricia?

Hoy tomé tus manos...
Íbamos hablando, en forma amena
Sentados juntos en el auto
El retorno era feliz por el deber cumplido
Por haber ayudado a un indefenso
Para que tenga una oportunidad más
En esta cruel, y muchas veces insensible vida

Reías, con esa risa que me trae loco
Con esos sonidos deliciosos 
Que me hacen volar en sueños
Estando aún despierto... reías
Y no pude contenerme, 
Sin previo aviso, puse en tus manos las mías

No las retiraste.
Qué pasó? Acaso te gustó?
Es que acaso has notado mis sentimientos?
Es que acaso no te soy indiferente?

Oh, poesía! Fue pura poesía ese momento
Que quedará grabado en mi memoria
En blanco mármol con buril eterno...

La vida sigue frenética sus pasos
No tiene tiempo para poesías
Nos alejamos, sin mediar palabras
Sobre tus manos o las mías
Eso fue una sonrisa? 
No lo sé, tu rostro está ya cubierto
Solo puedo admirar esos ojos de fiera
Que me hipnotizan, que me atrapan
Que me invitan a cruel martirio
Y a un premio mayor ... Será cierto?

Hoy me llevo a mi cueva solitaria
Un grande y hermoso recuerdo
Pues por un infinito instante
Fui feliz como un niño pequeño
Que ha recibido el regalo deseado
Hoy me entregaré a los dulces sueños
Con una sonrisa pegada a los labios
Y te buscaré en ellos, a lo mejor te encuentro
Y quiera la suerte que sigamos
Charlando alegres, tomados de las manos...

lunes, 18 de marzo de 2024

Escribir, sólo eso

Solamente escuchar algo de música
Imaginar ese rostro que te enamora
Esos labios que te apasionan
Esa fragancia que te embriaga
Y esas manos que te tienen atrapado

Solamente son letras apasionadas
Letras vacías, letras vanas
Que bien quisieran ser palabras
Ya ni siquiera frases completas
Y menos pensar en llegar a ser versos
Que hagan suspirar a los poetas

No tengo nada mas que decir
Tienes todas mis letras
Eres la dueña de mis emociones
Tienes en tus manos mis sueños
Y en esa deliciosa maraña de cabellos
Oh! Cómo quisiera yo perderme en esas selvas!

Me encanta la forma en que me miras
Esa mirada aguda, casi con malicia
Como queriendo atacar a inocente presa
Y devorarla lentamente, sin prisas
Me gusta tu risa alegre, quizá algo hostil
Para otros, pero para mí tan bella...
Cuando la escucho siento que vuelo
Ya no soy mío. Qué me has hecho?

Seguiré escribiendo mientras viva
Mientras siga deseando una caricia
Mientras siga soñando con un beso
Y con que llegue aquel dichoso día
En el que me digas:
 - Yo también te amo!
Loco poeta...