miércoles, 8 de marzo de 2017

Mujer, hoy en tu día

Mujer, hoy en tu día te vengo a cantar
Por todas las cosas buenas que me sabes regalar.
Creada fuiste para mitigar nuestras penas
Y para alegrar los dias de la creación entera.
Fuiste la primera quien tuvo la osadía
De romper los moldes y cambiar nuestras vidas.

En tu honor y por tu nombre hemos conquistado
Al mundo entero e incluso reinos imaginarios.
Imperios enteros hemos tallado a mano
Y hazañas inimaginables por ti hemos realizado.

Musa eterna de poetas y de soñadores
Por ti hemos escrito miles de historias de amores.
En mármol eterno se han grabado canciones
Y por ti se han desatado infinidad de pasiones.

Es tu regazo lugar único y privilegiado
Donde hallan tranquilidad héroes y villanos.
Has amamantado a dioses y a tiranos
Y has levantado nuestro mundo con tus propias manos.

Sabes ser una gran madre y una genial compañera
Y regalas amor a quien te lo pida de buena manera.
Pero también mostraras que eres terrible fiera
Cuando de defender se trate a tu familia entera.

Mujer, nunca serán suficientes las palabras
Para agradecerle al universo que Tú nos acompañas.
El camino andado, que la vida me ha regalado
Es mas agradable por el solo hecho de tenerte a mi lado.

lunes, 6 de marzo de 2017

Quiero creer...

Muchas veces tengo ante mis ojos
La dura y cruel, triste realidad
Me muestra sus terribles despojos
Y me invita a renunciar.

A renunciar a todo aquello
Con lo que alguna vez quise soñar
A todos y cada uno de mis proyectos
Pues nací condenado a fracasar.

No eres un ser elegido,
Tu estrella nació para nunca brillar.
Triunfar no está en tu destino,
¿Por qué no dejas de luchar?

Esta voz siempre está a mi lado
Y en mi cabeza no para de sonar.
Quiere que crea que nada valgo
Y que sin sentido, mi vida, será.

Pero... ¿Debo acaso hacer yo caso
A las voces necias que me hacen callar?
¿Quién dijo que está escrito el destino
y que de este sino no nos podemos apartar?

¿Acaso debo yo marchar en silencio
Por el cadalso cruel de la mortalidad?
¿Debo yo aceptar sin quejarme, la ruta
que otros para mí escribieron tiempo atrás?

Me niego a ser un simple cordero,
Que en silencio al matadero va.
Quiero creer que no nací solamente para esto,
Quiero creer que puedo logar la felicidad.

Felicidad por conquistar mis sueños
Y todos mis proyectos terminar.
Felicidad por amar y sentirme amado
Sin importar lo que digan los demás.

Quiero creer que no soy uno más
Quiero creer que soy un ser especial.
Quiero creer que Dios me regaló esta vida
Para disfrutarla a cabalidad...

Quiero creer que con mis letras
Tú también te puedas inspirar.
Deja atrás los lamentos, las quejas
Y construye tu propia felicidad.

Pues todos somos iguales ante el divino
Que nos hizo a su imagen y semejanza
Que nos hizo con gran amor y cariño
Y nos regaló nuestra libertad!

Rebelde 6

- Despierta Ibañez! Que haces gimiendo como marica? ... No necesitas repetir que el mundo es una mierda, y que la cagaste otra vez, porque esta vez si la has cagado hasta el fondo!!!
- Mi teniente? Es usted?
- No, so pedazo de huevon! Soy el arcángel Gabriel quien ha venido a visitarte... Quien mas voy a ser, pedazo de mierda inutil! Cuadrese y arreglese! Y limpiese las babas y los mocos!
- Si mi Teniente!... Que me pasó?
- Pues que lo drogaron Ibañez! Eso fue lo que pasó! Y ahora, tiene toditas sua celdas vacías... Prepárese porque viene el Mayor. Esta vez si la recontra cagaste Ibañez. Te jodiste.

La cara del sargento es una mezcla de sorpresa, enfado y sueño. Apenas puede mantenerse de pie. Tiene todo el cuerpo adormecido. Y los brazos están entumecidos. Le duelen un poco.

Y la cabeza. Siente que va a explotar su cabeza. Siente mil cinceles que taladran su cerebro y que quieren perforar su cráneo. Quiere gritar. Pero no lo hace. El sentido de la obligación y el pánico al haberse dejado drogar dentro de la comisaría es tan grande, que siente unas ganas terribles de miccionar y también de hacer deposiciones.

"Te cagas de miedo, maricon de mierda". Se dice a si mismo en silencio. Con la manga de la camisa se seca el sudor de la frente, y al buscar en los bolsillos por el pedazo de papel higiénico que siempre carga consigo, encuentra una hoja de papel doblada de manera extraña (parece una estrella) y se ve que está escrita por dentro.

La mira inicialmente con recelo. Y estando a punto de abrirla se presenta sin previo aviso el Mayor, que es el jefe de toda el área.

- Firmes, sargento. Relajese y tome asiento.
Ibañez no dice nada y automaticamente cumple con la orden del Mayor.
- Dejennos solos. Esta será una conversación privada. Solo el sargento Ibañez y yo.
- Como ordene mi Mayor. El teniente hace el saludo de rigor y se retira dela habitación, dejando solos al Sargento Ibañez y al Mayor, no sin antes apoyar su mano en el hombro de Ibañez y hacerle una señal de "fuerza mi camarada" pero con un gesto de desaprobación y resignación. Al salir cierra la puerta sin hacer mucho ruido.

Un minuto de silencio que parece una eternidad. El Mayor está sentado, mirando hacia un costado. Luego coge un bolígrafo y un papel y se lo alcanza a Ibañez.

Mira a Ibañez con la cabeza semi agachada, y en sus ojos hay un brillo especial. Una especie de risa irónica, y mueve la cabeza en signo de desaprobación, pero aparentemente complacido.

Ibañez no sabe como responder. Solo mantiene su cara de poker, sin emociones, y en su cabeza mil cosas giran y giran.

- Ok...
Es todo lo que dice el Mayor. Se levanta, camina unos pasos con las manos en la espalda, como meditando algo. Se detiene por un rato y luego dice, sin voltearse a mirar a Ibañez.

- Ocupese del papeleo. La treta de que fue sedado es muy buena. Pase por toxicologia y que le tomen muestras. Ahi debe negociar con Gutierrez, para adecuar los resultados. Y con respecto al acuerdo, nunca hubo nada, nunca existió. Nunca pasó nada. Se tomará unas merecidas vacaciones para reincorporarse posteriormente a sus labores habituales...

Ibañez no entendía una jota de lo que el Mayor estaba diciendo. Pero asentía en silencio. El alma habia vuelto a su cuerpo.

El Mayor se acercó mucho a Ibañez. Y casi susurrando le dijo:
- Eres el mas pendejo de todos, hijeputa. La próxima vez, me avisas primero o te saco la rechucha tu madre. Pero... La hiciste bien.

Luego se aleja. Lo mira con desdén. Y se sonríe, mientras menea la cabeza. "Sabía que no eras tan santito... Je je je"

Luego con voz firme y alta dice (asegurándose de ser escuchado a través de la puerta)

- Quiero ese papeleo esta misma tarde! Firmes sargento!!

Y se retira, dejando las puertas abiertas de par en par. El teniente y otros son tomados por sorpresa, pero asumen la postura universal de saludo ante su jefe.

Ibañez abre la palma de su mano y ve el trozo de papel en forma de estrella. Mueve la cabeza, y con una mueca como sonrisa, empieza a escribir el parte de los hechos. Sabe a la perfección lo que escribirá. Ya lo entendió todo.

"Eres una jodida de mierda, Pen. Cuando te agarre, ya vas a ver... Solo deja que te agarre, mocosa del demonio"... Sonríe, mientras en su mente ve claramente todos los hechos sucitados en la noche anterior y se imagina como habrán "aceitado" al mayor....

jueves, 2 de marzo de 2017

Rebelde prefacio

La isla de plástico.
Aunque se llama Tierra, realmente la superficie de nuestro planeta está cubierta en un 70% de agua. Solamente el Océano Pacífico cubre la tercera parte del planeta, tanto asi que, vista desde el espacio, la tierra parece un planeta de agua.
Aunque esto no es tan cierto. El agua en total solamente representa el 0.02% de la masa total de la tierra. Solamente que esta distribuida casi por completo en su superficie.
De esta agua, el 97% es agua salada. Del agua dulce, el 70% está congelada. Nos queda solamente una infima parte de agua dulce util para todo el consumo y actividades de la vida en la tierra.
Desde el inicio de los tiempos la humanidad ha producido desechos en su quehacer diario. Y la gran mayoria de ellos los ha vertido a los ríos y, en consecuencia, a los mares.  Durante milenios esto no habia representado ningún problema para la estabilidad de los ecosistemas del planeta.
Hasta ahora.
Con la industrialización y el progreso se han ido produciendo en forma progresiva y sistémica elementos toxicos y no degradables que, alegremente, hemos seguido vertiendo al gran basurero del planeta: el océano.
Y la mayor parte de los desechos que tiramos al mar son eso, plástico.
Las corrientes marinas han hecho que toda la basura de los mares se acumule en los vortices centrales, formando grandes islas de desechos en los principales océanos del mundo.
Isla? Dificil llamar isla a una formación como esta, donde los desechos plasticos acumulados por decadas flotan bajo la superficie del agua. Mas correcto es llamarla sopa de plástico. O de basura. Pero tampoco se le podria llamar como isla tan alegremente por su tamaño: la del oceano Pacífico tiene una superficie de 1.8 millones de kilometros cuadrados (en tamaño se acerca a México. El triple del tamaño de Francia. Imagínense) .
Y sigue creciendo. Nuestra actividad frenetica ha hecho que esta "isla" dentro de poco pueda convertirse en un verdadero continente de basura, donde se han acumulado todos los desechos y desperdicios de nuestra sociedad.
Es solamente cuestión de tiempo.
Y así, como los desechos que tiramos a los ríos, por los desagües o simplemente tiramos al suelo porque no nos sirve, y estos desechos y restos inservibles se juntan poco a poco gracias a las fuerzas de la naturaleza en un gran continente de desperdicios, de la misma manera, los "desechos" de la sociedad (ladrones, delincuentes, prostitutas, vagos y maleantes en general) suelen confluir siempre en un mismo lugar.
La naturaleza es así.

martes, 28 de febrero de 2017

Hoy te soñé, de nuevo...

Hoy en mis sueños te he encontrado. Y nuevamente has tomado mis manos, me has sonreído, me has mirado directo a los ojos y en ellos, pude ver de nuevo el paraíso eterno. Tu fresca sonrisa y tu inocencia de niña recién crecida contrastaban con tus impetus de diosa del deseo y tu fuerza de fiwra indomable.
Como siempre te he visto como una adolescente. Con el cabello algo revuelto, pero bien cuidado. Tu piel linpia yy tersa. Rus manos suaves y firmes. Y decias que me amabas.
Que nunca dejaste de amarme. Y que siempre estarías a mi lado, pase lo que pase.
Hoy te soñé nuevamente a mi lado. Y era nuevamente yo un adolescente enamorado. Ansioso de seguirte, deseando seguir tomando tu mano. Deseando nunca mas soltar este abrazo. Deseando que el mundo entero y el universo todo detengan su frenético paso. Y mantenernos flotando, para siempre, abrazados.
Hoy te soñé nuevamente. Y seguías siendo el ser mas hermoso que jamás mis ojos hayan disfrutado. Y seguias siendo la princesa bella de todos y cada uno de mis pasos. Y seguías ahi. Sin inmutarte. Sin reproches. Sin lamentos. Sin quejas. Solamente feliz por estar nuevamente a mi lado.
Hoy te soñé nuevamente. Y al despertar... Seguías a mi lado.

sábado, 25 de febrero de 2017

Rebelde 5

Ibañez. Ocupación: personal de seguridad (policía en retiro) Estado actual: Muriendo.

El sargento Ibañez nació en un pueblito alejado de la capital. Hijo de agricultores, su sueño era salir de ese pequeño lugar para conocer el mundo y hacer una vida nueva a la rutina de su vida. Se había acostumbrado a esa rutina en toda su niñez. Levantarse antes de que salga el sol, y acostarse en el último rayo del día. Solamente una comida al día, luego de la larga jornada. En la mañana un vaso de mate, y nada mas. La comida solamente al acabar la larga y dura jornada. Y dormir hasta el alba.
Esa era la unica rutina. Todos los dias. Sin excepciones.
Aprendió a leer en la escuelita del pueblo. Pero antes de ir a la escuela debía ayudar un poco con la faena de la chacra.
Y al retornar de la escuela iba directamente al campo, a continuar la labor. Hacía las tareas mientras comía, con el resto de la familia.
Apenas hubo aprendido a leer y escribir, le prohibieron asistir a la escuela. "No te enseñarán nada mas de utilidad!"
Escapó.
Un buen dia de esos, cargando mil sueños en su alforja, huyó de su casa. Besó a su mamá en la frente y le dijo: Me voy a la capital.
Su mamá no le dijo nada. Solamente le hizo la señal de la cruz en la frente, le llenó la alforja con algo de maiz y queso,y se regresó a sus quehaceres diarios.
No le dijo nada a su papá. Ni tampoco a sus hermanos.
Salió de madrugada.
Caminó dos dias hasta la ciudad mas grande cercana a su pueblito. Y se fue para el mercado. Ahi se ofreció de cargador a un comerciante de verduras que tenía un camión. "Pagame con comida" le dijo. Apenas tenía 16, pero aparentaba de mas edad. Era la dura vida que llevaba lo que le habia hecho envejecer.
Al comerciante le hizo gracia. Ademas el muchacho era fuerte y silencioso. Hacia lo que le ordenaban sin chistar.
- A donde vas?
- Quiero ir a la gran ciudad?
- Y tus papeles?
- No uso papel. Hierbita nomas...
- Ja ja ja... Buena broma. Me refiero a tus documentos...
- No se que es eso...
- Menudo problema.... Mmm. Pero me has caido bien y creo que te puedo ayudar. En la ciudad J... hay un centro de reclutamiento para el ejército. Ahí te hacen los papeles así hayas aparecido sobre la tierra sin más ni más. Pero tienes que servir a tu patria por dos años. Luego tendrás tus documentos en regla y podrás ir a la capital, si eso es lo que quieres...
- Y cuando vamos para allá?
- Primero vendere todo lo que pueda acá. Y las sobras en el pueblito N... Y lo que quede en el caserio K... De ahí nos vamos para allá. Si quieres que te lleve, tendrás que chambear.
- Chambeare pues...
- Una cosa mas. A partir de ahora tienes 19 años...
- Pero apenas voy a cumplir 16
- No. Los menores de edad no viajan solos. Tienes 19 años y te llamas J.. Ibañez. Trabajas para mi, solo que perdiste tus documentos. Entendido?
- Entendí
- Entonces... Ni una palabra mas. A trabajar.

El viaje se prolongó por casi tres meses. Mil pretextos para esto. Cambio de ruta. Muchas lluvias. Comprar mercancia más barata. Y todo este tiempo solo recibia una magra ración. Pero lo peor estaba por empezar.

Cuando llegaron al lugar, fue recibido sin mucho entusiasmo. "Estos cholos se escapan con frecuencia" "Sin papeles? Ta jodida la cosa" Igual lo enlistaron y lo enviaron a un cuartel fronterizo.

Al llegar allá(luego de dos semanas viajando en un maloliente camión, con muchos muchachos que lloraban a cada rato) se percataron que él habia sido asignado a ese lugar por equivocación. Asi que era excedente. Por tal motivo tuvo que dormir en el calabozo (no tenia asignado una cama ni uniforme) y le daban una ración famelica. Además, los soldados que lo cuidaban lo maltrataban a diario. Asi vivió dos meses. Estaba al borde de la inanición, cuando llegó el técnico que lo llevaría a su cuartel real.
Pero...
Hubo un "accidente" en el cuartel de los comandos, y uno de los reclutas falleció. Así que necesitaban a otro para ocupar su lugar. Además, el fallecido era uno mas que había llegado sin datos reales que consignar.
Lo asignaron a este cuartel. Pero primero lo alimentaron para que no muera. Y empezó la masacre de verdad.
Dias enteros sin dormir. Dias enteroa sin comer. Abandonados en la selva por semanas. Abandonados en el desierto. Abandonados en el mar.
Solamente los valientes de verdad podrian sobrevivir a tamaño castigo. Y los locos.
No enloqueció. Sobrevivió. Y se hizo mas duro que el acero.
Al terminar el segundo año de servicio, era sargento y se fue de baja. Le dieron sus documentos.
Y se fue para la gran ciudad. Con las propinas que habia ahorrado (no era mucho) se presentó a la escuela de policias. La recomendación de su jefe ayudó.
Se recibió de policia.
En sus papeles figuraba 23 años. Solo él sabia que no era asi. Que recien tenia 20 años. Pero eso no importaba ya.
Conoció a una mujer de 35 años. Se enamoró. Se fueron a vivir juntos.
Tuvieron un hijo (ella ya tenía tres). Y un día la encontró con su vecino en su cama teniendo sexo frente a su hijo. Ella le gritó. Y le dijo que se largara. Y él se fue.
Su pequeño murió de neumonia antes de tener un año.

Ya no quiso saber nada de parejas o de hijos. Se dedicó en cuerpo y alma a su trabajo. Ascendió con rapidez. Lo asignaron a delincuencia juvenil, por el tacto que tenia para manejar a los adolescentes y por... no recibir coimas.

Nadie lo queria cerca. Era un policia honesto. Y eso no funciona.
Asi que, luego de 10 años de servicio fiel y honesto, fue dado de baja por "renovación de cuadros"

Asi que buscó chamba como guardia de seguridad. Le asignaron ser guardia en un centro comercial. "Super tranqui. Casi nunca pasa nada"

Hasta hoy. Ya era hora de cerrar. El era siempre el último en retirarse. Se le acercó un chibolo a preguntarle algo. No recuerda que. Solamente sintió la punzada y el inconfundible olor a pólvora. Pero lo redujo. Le quitó el arma y lo abatió. También a los cuatro mas que venían con él y que se le abalanzaron, creyendo que ese balazo lo había dejado fuera de combate.
Tontos. Una mueca parecida a una sonrisa en la cara de Ibañez. Recordó a Juan José. Muerto en un estupido accidente con su moto. A Pensy. La encontraron ahorcada en un hotel. Con moretones y quemaduras de cigarrillo. A El Kiddy. Acuchillado en prisión. Y a Lex Letter, muerto por sobredosis de heroina en un parque.
Y sentia que ellos estaban ahí. Y que él los había matado.
"Tenias razón Pen. La vida es una mierda. Todos la cagamos..."

Rebelde 4

El Kiddy. Nombre real: Raul Alberto. Edad 14 años. Oficio: sicario. Estado actual: disponible.
Nació y creció en el barrio más peligroso de la ciudad, donde el hampa campeaba, y donde los atracos, ajustes de cuentas y robos eran pan de cada día. Eran y son.

Hasta ahora nadie aún ha podido erradicar ese flagelo de la ciudad. La venta de drogas y los ajustes de cuentas son actividades muy lucrativas. Y no hay policía que se resista a una buena coima. Además, el sueldo de los tombos es tan bajo, que con una buena coima facil le triplicas su ingreso mensual.
Cuando nació su papá estaba en la cárcel. Le decían El Colorao, porque era el mas blanquiñoso de la zona. Ya había plomeado a unos cuantos, y también los había chaveteado. Pero siempre salía en libertad. "Por buena conducta" y ademas, casi siempre no se encontraban "pruebas fehacientes"  de sus delitos.

Su mujer, la mamá de El Kiddy, era "ama de casa", "Por algo trabajo" solía decir su papá, y además "yo soy el hombre de la familia, yo paro la olla!".
Gustaban de sentarse frente a la puerta de su casa, con sus vecinos y amigos, a libar licor al aire libre, con música a todo volumen. Y el Colorao gustaba de tocar las nalgas de su mujer a vista de todos (era la mas rica del barrio, eso decían).

Cierta vez uno de los recién llegados (no sabía de  la fama del Colorao) se puso atrevido con la mujer. Lo chaveteó ipso factum, en ese mismo instante, pero solamente la cara ("para que no se olvide el hijeputa ese"). No se supo nunca mas del tipejo ese.
Sus primeros juguetes fueron los "cuetes" de su viejo. Les hacía gracia como cogía el cuete y hacía el gesto de disparar. El Colorao hacía que se moría de un plomazo dado por el Kiddy. Y todos festejaban la ocurrencia.

Un buen día no regresó el Colorao. Y a su vieja se la llevaron los tombos. Luego de manosearla en publico y golpearla a gusto. El Kiddy pasó a ser cuidado por una tía (hermana de su padre) en una zona aledaña. La vieja era solterona y amargada. Nunca mostró el más mínimo apego por el chamaco, que apenas tenía 6 años de edad. Lo alimentaba con cerveza y comida enlatada, galletas y caramelos: "eso les gusta a los mocosos de tu edad" solía decirle. "Eres el más feliz de la tierra, así que ahora lárgate y dejame dormir". La tía tenía dos tienditas en el mercado, donde se vendía comida.

Obviamente ella no preparaba nada, ni vendía. Solamente administraba su plata. Era buena para eso. Y el Kiddy fue a la escuela. Aunque ya tenía 8 años, empezó inicial para aprender algo en esta vida. ("Y para que dejes de joder acá" repetía su tía con mucho cariño).
Como era el mayor del grupo, no tuvo reparos en masacrar a los mas chibolos, y además les metía miedo a los mayores ("te voy a plomear, hijeputa, yo aún tengo los cuetes de mi viejo" solía decirles a los más avispados, y todos huían en silencio... Nadie desconocía el nombre del Colorao)
Un par de años más, y los panas del barrio lo contactaron para una chambita: "eres bien avispado, chamaco. Necesitamos uno como Tú". Era para hacer de campana en un atraco.

No fue tan difícil. Solamente avisar que ya está todo OK. Y pararse en la esquina bien atento a que no venga la tombería.
Y le dieron su chela ese día. Y se embriagó. Y saltó y rió de felicidad.
"Oe Kiddy, tu tía guarda billete en algún lugar. Por qué no le tomas "prestado" algo?"
(Hmm, por qué no?, pensó el Kiddy. Total la vieja es jodida, y ni caso me hace.) Ya hace buen tiempo se había percatado del lugar donde guardaba los billetes la tía: en unos tarros de azúcar y harina. Vieja monse, creía que no se iba a dar cuenta.

Le sacó todo el billete que encontró, cogió su mochila y se largó así nomas. Total, con sus patas tendría una vida buena y divertida.
Con ese billete compraron un cuete a buen precio. Y se dedicaron a atracar. El Kiddy demostró su sangre fría cuando plomeó al guardian de un solo tiro, a quemarropa, sin sentiomiento de culpa. Hasta con una pequeña sonrisa de satisfacción.

Tenía apenas 12 años cuando hizo esto. Ahora tenía su cuete. Tenía billete. Y tenía un nombre, un digno hijo del Colorao: El Kiddy.
Primero fue un policia quien vino a pedir sus servicios: "Oe, necesito a alguien que plomee a este maricón. Se está levantando a mi mujer cuando me voy a la chamba. Y la conchesumad... se hae la huevona, y dice que no pasa nada, pero ya los descubrí. Quise golpearlo, quise hacer algo, pero jodo mi carrera. Acá tienes todo el billete que tengo, métanle bala a ese maricón"

Fue papayita para el Kiddy. El baboso entraba a la casa del tombo a escondidas, por un corral oscuro. El Kiddy lo esperó, y cuando estuvo a su lado, le metió un plomazo directo al corazón. Cayó casi sin gemir. Y como el calibre era pequeño la bala no salió. Lego arrastraron el cadaver al basural y se lo dieron a los perros vagabundos.

En la comisaria apareció su foto en la lista de  desaparecidos. Nada más.
Luego empezaron a llover las ofertas. El Kiddy era implacable, era temerario y osado. Y nadie osaba delatar su identidad.
Hasta que un buen día hubo una batida general en el lugar donde estaban festejando un nuevo atraco. No pudo esconder la pistola. Y lo llevaron con los demás, lo llevaron al área de menores.
Un tal Ibañez lo recibió.

Y en la misma jaula donde lo pusieron, trajeron a un pelucón fumón, que no era menor. Parecía conocido del Ibañez este, pues se quedó con su guitarra dentro de la jaula. E incluso se animó a tocar una canción bravaza, que nunca había escuchado jamás, pero era de lo mejor.
- Tócate otra Bro.
- Ahí nomas, chamaco. Parece que la noche está movida hoy, ya que traen a algunos mas...