Tienes mi corazón y mi alma, toda mi vida entera En la palma de tus manos bellas, mi diosa eterna.
Ante la embriagante imagen de tu divina presencia, Me abandonan la cordura y la razón, pierdo la calma Olvidando hasta quien soy yo, y quien me acompaña.
Pasa el tiempo sin que lo note, cuando me miras, Ríes divertida y alegre, al notar que estoy sufriendo Invitándome a volar contigo, me insinúas un beso No tienes compasión de mi, ni de mis sentimientos. Cuando finalmente logro unir mis labios a los tuyos tiernos, Escapa mi alma al infinito en un suspiro eterno, Siento en ese preciso momento que soy el dueño Amo y señor del mundo entero, y del firmamento...
Mira esas gaviotas, poeta amado, mira como vuelan libres en la inmensidad,
Mira sus siluetas, como se van mezclando con el cielo y con el mar...
Ves? Ves toda esa hermosura en el infinito horizonte sin par,
Ves como las nubes cambian de color ante la presencia del sol?
Y mira las formas indescriptibles. Puedes imaginar todo lo que quieras,
con solo verlas, y admirar los bellos matices que la naturaleza nos da.
No te pongas triste poeta, la realidad no solamente es lo que tus ojos ven,
sino también lo que con tu alma y con tu corazón puedas admirar.
Ves las olas? Solo son movimientos del agua, que llega a la arena
de la playa impulsadas por las corrientes y los vientos de altamar.
Pero a tus ojos, es el juego de beso eterno entre la playa y el mar,
Que eternamente enamorados, ni se quedan, ni se van...
Ves la luna? Es solamente un astro sin vida que orbita a nuestra tierra,
pero a tus ojos es la Diosa de la noche, la eterna compañera del sol.
Y las estrellas? Son acaso solamente unos astros de fuego y energía,
ubicadas a millones de kilómetros de distancia de nosotros?
Pues no es así, las estrellas son las luciérnagas que al cielo se echaron a volar,
son tus sueños de libertad, son tus anhelos de volar mas allá.
Ya ves, poeta? No solamente uses tus ojos para ver la realidad.
El mundo es bello, a pesar de toda su crueldad. La vida es bella,
pero para que puedas vivir, debes con la muerte saber convivir.
Pues siempre habrá un nuevo retoño, que brotará de las cenizas
y de las lágrimas, después de una cruel fatalidad. No es tan malo sufrir,
si después de esto puedes volver a reír y a disfrutar de un amor de verdad.
Toma mis manos, te pertenecen. Toma mis labios, te desean.
Toma mis sueños, que son tuyos. Toma mi cuerpo entero, poeta.
Toma mi corazón y mi alma, pues los tuyos conmigo habitan.
Recuerda que hemos sido y seguiremos siendo solamente uno.
En cuerpo y alma. Para siempre. Eternamente.
Te miro, y sonrío nuevamente, mi musa eterna.....
Qué bueno es tenerte! Qué dichoso soy yo, por tu sola presencia,
Qué suerte la mía, el habernos encontrado en esta vida,
Más aún, soy un bastardo afortunado, por todo el amor que me das...
Que difícil es hacer poesía, cuando tu alma de poeta ya no quiere cantar,
Al acabarse la alegría, con la que contemplabas la realidad.
Qué difícil hacer poesía, cuando estando enamorado de verdad,
Teniendo a tu musa al lado, para poderle mil versos cantar,
Ves que el mundo está lleno, de desdicha y mucha maldad.
Qué difícil hacer poesía, cuando donde antes había amor,
Solamente una mirada vacía, hoy te mira sin ton ni son.
Y del fuego que consumía, tu alma, tu cuerpo y tu corazón,
Ahora solo quedan cenizas, donde enterrada está la pasión.
Que difícil hacer poesía, cuando en donde antes había amor,
Ahora solo hay hipocresía, envidias, rencores y mucho dolor.
Que difícil hacer poesía, cuando la persona amada te dejó,
Y se fue buscando en la vida, un nuevo camino y un nuevo amor.
Qué difícil hacer poesía, cuando un niño hambriento ves pasar,
Que te extiende su mano vacía, y sus ojos tristes de tanto llorar,
Con su mirada compungida, imploran compasión y un pedazo de pan.
Qué difícil es hacer poesía, cuando ves a tus hermanos destrozar,
Nuestro única casa conocida, hasta convertirla en un lugar infernal.
Qué difícil hacer poesía, cuando al borde del abismo estás,
Y con mirada afligida, ves que desperdiciaste tu vida sin más.
Sueñas con tener en tu vida, tan solo una nueva oportunidad,
Pero ves que solo te queda, el último paso final para dar.
Qué difícil hacer poesía, cuando soñabas que en libertad,
tus alas extendías, volando libre, pero al despertar,
En una fría celda vacía, purgas condena en soledad,
atado de pies y manos, encadenado a tu fatalidad.
Cómo poder cantarle a la naturaleza, si ya no la ves por ningún lugar?
Y con acero, plástico, humo y concreto, destruyeron tu bella ciudad?
Díganme si se puede hacer poesía, si hasta contaminado está el mar,
Y ver la luna y las estrellas desde tu ventana, es ya una quimera irreal?
Qué difícil es hacer poesía, cuando te enfrentas a la cruda y cruel realidad,
Qué difícil cantarle a la vida, cuando a tu casa la muerte se vino a quedar.
Cuando en tu camino solo hay sombras, sufrimiento, penas y enfermedad.
Qué difícil hacer poesía, cuando tu alma de niño, herida de muerte está....
Pero seguiré haciendo poesía, mientras mi alma pueda en libertad
Extender sus alas al infinito, y así mis sueños ponga a volar.
Seguiré escribiendo en versos, lo hermoso que se siente amar,
Más aún si a mi lado tengo, a la que es culpable de mi suspirar.
Seguiré cantando a la vida, mientras una flor vea retoñar,
Mientras pueda en las olas, poner mi barco de sueños a navegar.
Mientras pueda con un beso tierno, sentirme en el paraíso terrenal,
Mientras una sonrisa bella, me invite a reír y la vida a disfrutar.
Mientras una mano amiga, tome las mías cuando la necesitaba más,
Mientras escuche de tus labios, que nunca me dejarás de amar.
Seguiré haciendo poesía, aunque poesía esto no quieran llamar,
Pues nunca seré atado a reglas, con las que me quieran encasillar.
Seguiré haciendo mi poesía, aunque de loco me hayan de tildar,
Le seguiré cantando a la vida, pues ella me regaló mi libertad...
Mientras mis pies adoloridos y sangrantes por el largo trecho andado,
sufren las punzantes caricias de cardos y guijarros,
Mi frente altiva mira al horizonte infinito y lejano,
mi alma sonríe dichosa por todavía seguir caminando.
Llevo mi alforja a cuestas, con recuerdos buenos y malos,
Mi corazón se ha nutrido de muchos besos y abrazos.
Mi alma se ha fortalecido por las caídas y los palos
Que he recibido casi a diario por seguir caminando.
Y es que no hay camino que sea completamente malo,
Pues conmigo siempre estará mi Señor a mi lado.
Seguro estoy que será feliz y fiable el trecho andado,
Pues como todos y cualquiera, soy su hijo amado.
Seguiré feliz mi camino, disfrutando el bello paisaje
El canto de las aves, las nubes bellas, robustos árboles
Los ríos de cristalinas aguas, los mas bellos mares,
Las arenas de la playa, la nieve en la montaña,
Las gotas de agua de una lluvia que riendo cae,
mojando mi rostro, enjugando mi frente, lavando males,
Llevando vida a todos y cada uno de los lugares.
Mas feliz aún pues para este largo y placentero viaje,
Me acompañará Él siempre, y pude en él encontrarte,
Mas aún, tengo la dicha, mi musa eterna, de amarte...